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UC - Críticas

QUENTIN TARANTINO - Guionista y Director
LAWRENCE BENDER - Productor
HARVEY WEINSTEIN & BOB WEINSTEIN - Productores ejecutivos
ROBERT RICHARDSON - Director de fotografía
SALLY MENKE - Montaje
YOHEI TANEDA - Diseño de producción (Japón,China)
DAVID WASCO - Diseño de producción (USA,Mexico)
YUEN WO-PING - Asesor en artes marciales
THE RZA - Musica original
PRODUCTION I.G - Prod. de secuencias de anime
K.N.B. EFX Group - Ef. especiales de maquillaje


SANGRE FÁCIL

"Kill Bill" es la super-promocionada como cuarta película de Quentin Tarantino, l'enfant terrible del cine americano de la última década, aunque en realidad debería promocionarse como la mitad de su cuarta película, puesto que el film le salió tan largo que tuvo que estrenarlo en dos partes.
Después del estrepitoso fiasco de "Jackie Brown", Tarantino se lo tomó con calma a la hora de dirigir su siguiente proyecto y de volver un poco a sus orígenes. "Kill Bill" no es una obra maestra. Seguro que encantará a la legión de fans del cineasta, pero también sacará de sus casillas a sus detractores.



La historia de la película es tan simple como millones de veces vista: la historia de una venganza, pero claro, en manos de Tarantino se consigue darle la vuelta y recrear una película tan interesante como tramposa. Si comparamos los excelentes guiones de "Reservoir Dogs" y "Pulp Fiction" con este, claramente "Kill Bill" saldrá en desventaja, puesto que el guión es casi anecdótico, pese a que se haya adornado con esos desórdenes secuenciales a que nos tiene acostumbrados, lo que vale la pena de la peli es la realización donde Tarantino nos cuenta una historia de samurais a ritmo de "spaguetti-western", con un talento que solo él es capaz de manejar y ser bien recibido por crítica y público.



En esta nueva película del ex-dependiente de video-club nos encontramos con sus mayores virtudes a nivel de planificación, pero a mi parecer peca de una pretenciosidad estética en algunos momentos y sobretodo de una violencia extrema y excesiva. Vamos a analizar estos últimos puntos que seguro serán controvertidos.
Con pretenciosidad estética me refiero a que están muy bien los juegos de Tarantino, tener la osadía de por ejemplo meter una escena entera confeccionada con dibujos manga en mitad del film o de colocar otra en blanco y negro para contrastarla inmediatamente con otra de tonos azulados o una donde divide la pantalla al estilo de De Palma, pero esas soluciones estéticas deben estar justificadas por algo más que un lucimiento personal y a mi en ocasiones no me lo pareció. La escena manga me parece del todo prescindible ya que lo que cuenta no aporta nada a la historia, más bien lo contrario puesto que ese pasado terrible de la infancia del personaje O'Ren Ishii que parece justificar la maldad adulta del mismo, se encarga de tirarlo por tierra la sosa interpretación de Lucy Liu (esa torpe, actriz?), carente de matices y las ambigüedades que hubiera requerido alguien así y que encima tiene en dos de sus esbirras a los malos más interesantes de esta primera entrega (el tercero sería Elle Driver interpretado por una estupenda y cachonda Daryl Hannah que promete una segunda entrega mucho más desternillante): la colegiala Go Go Yubari interpretada con solvencia y algo de morbo por Chiaki Kuriyama y que parece haberse escapado de la isla de Battle Royale de Kitano y la enigmática Sofie Fatale interpretada por la sugerente Julie Dreyfus y que la pobre es una de las que peor lo pasa...




La escena de la lucha bestial de una correcta Uma Thurman (digo correcta porque su personaje no requiere mucho más, aunque lo realiza con su habitual eficacia) contra más de 80 samurais está grabada parcialmente en blanco y negro (sin venir a cuento), se supone que para suavizar la violencia de la escena, para luego rodarse en un preciosista contraluz azul, muy estético y bello, hay que reconocerlo y luego termina la batalla en una escena bajo la nieve. Son dos ejemplos de mi afirmación sobre la pretenciosidad estética de la película.



Respecto al punto a que he hecho referencia sobre la violencia, también considero que Tarantino se excede en esta ocasión (no me lo pareció en sus dos primeras películas), y supongo que con esta peli volverá a reabrirse la polémica sobre la violencia en el cine. Hay momentos en que falta ironía y es demasiado brutal, es una violencia hecha para disfrutar de ella, de la sangre, de los desmembramientos, etc.. y no me vale eso de que no se debe tomar en serio la violencia en el cine de Tarantino, porque esta película está construída exclusivamente alrededor de la violencia, ya que es su eje argumental (tampoco pretendo que se lance un mensaje moralista para justificarla ni nada por el estilo, simplemente cuento las sensaciones que tuve al ver la peli).



Bueno, después de decir todo esto y de haberme despachado a gusto con el cabroncete de Tarantino y antes de morir apaleado por sus fans más aférrimos, sólo me queda decir que sin analizar tanto las cosas he de reconocer que pasé un buen rato, dos horas intensas, diferentes y que estoy deseando ver la segunda parte...

UC (Daniel Farriol).

TRAILER